logo con foto columnaSon casi 350 mil afiliados que están trabajando discretamente para participar por primera ocasión en la elección federal del 2021, con objetivos principales: Mantener su registro como partido político, obtener escaños y curules en el Congreso de la Unión en 2021 y apoyar la *Cuarta Transformación*

            Este fin de mes se anunciará en Sinaloa la conformación de un comité directivo estatal y, posiblemente, germinen los primeros precandidatos que participarán en la contienda electoral del próximo año.

            Y (ojo), se prevé otra rebanada de priistas que podrían incorporarse a este nuevo proyecto político, frustrados por el giro que ha dado el tricolor en los últimos años en el gobierno estatal y por lo que se avecina en la selección de candidatos *quirinistas*

            Apenas hace dos meses (14 de octubre de 2020), el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TRIFE), otorgó el registro al nuevo partido político llamado *Fuerza Social por México*, cuando un mes antes, el Instituto Nacional Electoral (INE), había rechazado la solicitud por considerar que se había quebrantado la norma que prohíbe a los sindicatos incorporar a sus agremiados a un partido político.

            Y es que el bastión principal de *Fuerza Social por México*, es la llamada Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México *(CATEME)*, que dirige el senador suplente de *MORENA*, Pedro Haces Barba.

            Es un nuevo partido que se considera de una posición de centro izquierda progresista y adepto a los postulados del presidente Andrés Manuel López Obrador, con el lema *Unidos somos la Fuerza*

            Para la elección del 2021, *Fuerza Social por México* tendrá un presupuesto de 158 millones de pesos, de acuerdo a lo proyectado por el INE; pareciera corto, en comparación con lo dispuesto para los partidos “grandes”: pero la voluntad entusiasta del nuevo partido, seguramente será abrumadora para alcanzar sus objetivos.

            En Sinaloa tendrán a elementos que han participado tanto en actividades políticas como en la administración pública. Por eso, no sería nada descabellado augurar una transformación productiva para el porvenir del estado.

            Y esta situación, seguramente, resquebrajará parte de la estructura del PRI, sobre todo ante el insistente capricho de imponer como candidato al gobierno de Sinaloa a un elemento externo con antecedentes panistas con cierta reputación negativa.

            Si el baluarte de *Fuerza Social por México* es la *CATEME*, no sería quimérico pensar que muchos trabajadores y empleados aglutinados en algunos sindicatos oficialistas se conviertan en simpatizantes de este nuevo partido y, en consecuencia, favorecer con el sufragio a los candidatos que postulen por este lado.

            Estamos a unas semanas de comprobarlo.